El campo energético personal en otoño
El otoño es una estación de introspección y limpieza. A nivel energético, es el momento ideal para revisar nuestro campo áurico, liberar cargas emocionales y recuperar energía dispersa. Las hojas caen para que brote lo nuevo: lo mismo pasa con nosotras.
Reflexiones Estacionales: El Mensaje del Otoño
El otoño llega sin prisa, pero con firmeza.
Nos recuerda que todo lo que alguna vez floreció, también tiene derecho a soltar.
En esta estación, la naturaleza entera entra en un proceso de depuración.
Los árboles no dudan: sueltan lo que ya cumplió su ciclo.
¿Y nosotras? ¿Qué estamos listas para dejar caer?
El ritmo interno del otoño
En un mundo que nos empuja a producir sin descanso, el otoño nos invita a frenar, a bajar el ritmo, a escuchar el murmullo del alma.
Es tiempo de volver a casa, a lo esencial. De ordenar el espacio interno y físico. De prepararnos, como la tierra, para el recogimiento.
Soltar con sabiduría
Soltar no siempre es fácil. A veces, lo que necesitamos dejar ir aún duele, o nos da miedo.
Pero también puede ser un acto amoroso. Como el árbol que deja ir sus hojas para conservar su energía.
¿Y si soltar fuera una forma de autocuidado?
Preguntate:
¿Qué patrones ya no quiero sostener?
¿Qué relaciones, roles o expectativas se sienten pesadas?
¿Qué pensamientos se están volviendo hojas secas en mi mente?
Rituales otoñales para el alma
Limpieza energética: sahumar el hogar con la intención de liberar cargas.
Escritura consciente: escribir una carta a lo que deseo soltar, y luego quemarla.
Caminar entre hojas secas: como un acto simbólico de rendición y belleza en el cambio.
Crear un altar otoñal: con elementos de la tierra, colores cálidos, y una vela que represente tu luz interior.
El otoño no es pérdida. Es transformación.
La caída de las hojas no es muerte, es preparación.
Así también nuestros procesos.
Cada vez que soltamos algo que ya no vibra con nuestra verdad, estamos creando espacio para lo nuevo.
Honremos el tiempo de soltar, de ir hacia adentro, de confiar en el ciclo natural del alma.